Autoridades regionales difunden en terreno proyecto de ley que crea el Sistema de Financiamiento Solidario para la educación superior

Jueves 14 de Junio, 2018

 

 

Hasta la sede de Inacap de Copiapó, llegaron la Intendenta Regional Berta Torres Licuime, las secretarias Regionales ministeriales de educación Náyade Arriagada Alarcón y de Gobierno Sofía Ávalos Morales, para difundir en terreno el proyecto de ley que crea el Sistema de Financiamiento Solidario (SIFS) para la educación superior.

 

Tras dialogar con los estudiantes de la casa de estudios, la Intendenta Regional Berta Torres señaló que “el Presidente Sebastián Piñera está cumpliendo el compromiso que ningún jóvenes se quede sin estudiar por falta de dinero, por tanto este proyecto de ley asegura a los jóvenes un fondo realmente solidario y justo, que saca a los bancos del sistema de financiamiento, lo estamos llevando al Estado, que será el que lleve adelante este proceso íntegramente”.

 

Por su parte, la seremi de Educación explicó que “este fondo solidario tiene avances en tres sentidos principales, uno que establece una vinculación con el Estado y ya no más con la banca privada; segundo, que la máxima cantidad de cuotas que se pueden pagar es por 15 años, al término de lo cual se termina de pagar la deuda; y, por último, todos los alumnos que estén tengan el Fondo de Crédito Universitario o CAE, podrán acogerse a este nuevo fondo solidario”.

 

Para Daniela Barraza León, estudiante de Sicopedagogía en Inacap Copiapó, esta es una gran oportunidad de “pagar el valor real de la carrera y no quedar con una deuda inflada por los intereses como sucede con el CAE”.

 

Una opinión similar emitió la estudiante de Ingeniería en Administración de Empresas Karen Carrion Riveros: “esto es algo muy beneficioso para todos los alumnos porque como ahora se manejará a través de un organismo del Estado, serán intereses fijos lo que lo hará más asequible de pagar”.

 

Finalmente, Abigail Michel Canihuante, quien cursa tercer año de Sicopedagogía en Inacap, “esta es una excelente noticia porque esta nueva modalidad que nos da más opciones de pago”.

 

 

Nuevas reglas


El Sistema de Financiamiento Solidario (SIFS) reemplazará al Crédito con Aval del Estado (CAE) y al Fondo Solidario de Crédito Universitario (FSCU) y será administrado por una institución estatal, sacando a la banca del sistema.

El SIFS estará disponible para todos los estudiantes que pertenezcan a los nueve primeros deciles de ingresos y accedan a instituciones de educación superior acreditadas. Para quienes ingresan a universidades, deben tener al menos 475 puntos promedio en la PSU. Quienes opten por CFT o IP, deberán tener un promedio NEM superior a 5,3 o pertenecer al 50% superior de su promoción o ranking.

El sistema financiará el arancel regulado más un porcentaje de la brecha entre arancel regulado y arancel real (éste dependerá de la vulnerabilidad del estudiante y del nivel de acreditación de la institución), con un tope de 1,5 veces el arancel regulado, y tendrá una tasa de interés de 2% real anual.

Las instituciones de educación superior deberán garantizar que los alumnos que obtengan el crédito estatal y que pertenezcan a los seis primeros deciles de ingresos no paguen mientras estudian. Para ello, deberán cubrir aquella parte del arancel real que no cubre el crédito estatal y las becas de arancel estatales con becas y/o créditos propios.

El esquema de pago del SIFS contempla hasta 180 cuotas (15 años). Una vez pagadas, la deuda se extinguirá sea cual sea el remanente. En el caso de las cuotas que los jóvenes soliciten suspender por cesantía o por tener ingresos inferiores al salario mínimo se considerarán pagadas.

Los actuales deudores del CAE deberán expresar su voluntad si quieren traspasarse al nuevo sistema. En ese caso, la institución estatal pagará al banco y generará un nuevo crédito para el beneficiado, con las nuevas características.

En régimen, anualmente, los potenciales beneficiados del SFS serían 319.132.

Actual escenario

Hoy existen dos sistemas de créditos subsidiados por el Estado para financiar estudios superiores: el Fondo Solidario de Crédito Universitario (FSCU) y el Crédito con Aval del Estado (CAE).

El FSCU es exclusivo para las universidades del CRUCH y desde sus orígenes ha tenido condiciones favorables para sus beneficiarios, tales como una tasa baja, contingencia al ingreso y un monto máximo de años de pago, luego del cual, bajo el cumplimiento de ciertas condiciones, la deuda se extingue. Solo el 27% de los estudiantes de pregrado tiene la posibilidad de acceder al FSCU.

Para el resto, la única alternativa es el CAE, disponible para todos los estudiantes de instituciones acreditadas. Sin embargo, en su origen presentaba condiciones bastante peores al compararlo con el FSCU, teniendo una tasa de interés mayor, ningún tipo de contingencia al ingreso y sin plazo de extinción de la deuda.

Durante el primer Gobierno del Presidente Piñera, el Congreso aprobó la Ley 20.634 que permitió una rebaja de la tasa de interés del CAE. Así desde 2013, la tasa de es del 2% anual, subsidiada por el Estado y aplica tanto para quienes firmaron sus créditos desde ese año, como de forma retroactiva para quienes están pagando el crédito y lo habían firmado años anteriores.

Por otro lado, el CAE estableció que los bancos pueden vender parte de la cartera de créditos al Estado. Según datos de la Dipres, en los últimos años el Fisco ha comprado el 45% de la cartera anual de deudores.

De acuerdo con los datos de Comisión Ingresa, del total de jóvenes que han estudiado con el CAE, 397.700 aún están en etapa de estudio, mientras que 86.377 están dentro del periodo de gracia antes de que se inicie el cobro. En tanto, 390.220 están en etapa de pago. De este último grupo, el 77% son egresados de sus carreras y 23% son desertores.

El costo fiscal del CAE fue de $549.629 millones, mientras que el del FSCU alcanzó los $96.841 millones, según el Presupuesto 2017.